La fototerapia LED es una técnica cosmética que se aplica para mejorar la textura y la apariencia de la piel. Consiste en exponer la zona deseada a una «luz fría» con el fin de que se activen los foto receptores y se generen una serie de respuestas biológicas.
Su funcionamiento se basa en el hecho de que la piel utiliza la luz como fuente de energía para promover la reparación o el rejuvenecimiento de las células dañadas. La luz acelera la reparación de los tejidos, al tiempo que tiene el potencial para eliminar bacterias.
Contribuye a combatir el acné y el envejecimiento, favorece los procesos curativos en la piel, corrige el tono y, en general, mejora su aspecto. También proporciona más firmeza, uniformidad y luminosidad.
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